La pesadilla de Darwin
A 50 toneladas de filetes de blanco pescado por avión destino al Primer Mundo, casi nadie está libre de no haber comido alguna vez un pescado que se vende en las pescaderías como "mero". Los filetes de "mero" no son los de otra especie que la de la perca del Nilo protagonista de La pesadilla de Darwin. Cada uno de nosotros contribuimos comiendo filetes de "mero" a la realidad que se narra en esta paradoja mortal de la que somos responsables.
Sigue leyendo en Terra.ORG
La otra guerra de los mundos: depredadores, globalización y cinismo
"La pesadilla de Darwin" tiene el mérito de explicar algo que no in-teresa a nadie, y el valor de seguir interesada en explicárselo a to-do el mundo. Porque el foco de atención de este modélico docu-mental no es otro que África, cuna olvidada de la Humanidad, desti-no turístico de los privilegiados, pero, sobre todo, despensa y verte-dero de las potencias blancas de Occidente que la han sumergido en un pozo de pobreza, guerra, corrupción y marginalidad in secula seculorum. La imagen que devuelve el espejo inevitablemente mo-lesto del subdesarrollo no podría ser más nítida: es la falta de es-crúpulos de aquellos que continúan expoliando a los más débiles a través de un nuevo orden de colonialismo, pero también la conni-vencia de los que la aprueban y la indiferencia de quienes, final-mente, apartan la mirada hacia otro lado.
Sique leyendo en La Butaca
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home